Tú no juegas.

Las chicas y los chicos de entre 15 y 18 años lo tienen muy cerca, ahora ya sí, ya han de decidir hacia dónde quieren encarar su futuro. Muchas de estas personas lo tienen claro, otros todavía lo rumian, pero hay una buena parte que ni lo uno ni lo otro, da igual que se siente excluido de este sistema.

Y cuando hablo de Exclusión social quiero dejar constancia de que el tema no es tanto la pobreza y las desigualdades, que también y mucho, sino la reflexión hacia la pregunta: ¿en qué medida una persona siente que pertenece en un lugar dentro de la sociedad ? quien marca la distancia entre los que participan en las dinámicas y quién no ?.

En una sociedad donde la competitividad es un valor central, los mecanismos de exclusión constituyen una regla de juego elemental y necesaria. La competitividad es por naturaleza excluyente, por eso, niños, ancianos, mendigos, inmigrantes, indígenas, minusválidos deficientes, etc. fácilmente se convierten en excluidos. Todo lo que no cumple las expectativas de una sociedad competitiva es excluido.

El excluido es queda fuera de un colectivo, de un sector, de un territorio, está excluido si no pertenece a … si no se beneficia de un sistema o un espacio social, educativo, político, cultural, económico , al no tener acceso al objeto propio que lo constituye: relaciones, participación en las decisiones, en la creación de bienes y servicios para la cultura y la economía.

La exclusión social es una enfermedad de la sociedad actual, y los excluidos son la cara.

Hay que estar alerta de los efectos de la exclusión y los riesgos de ruptura de la cohesión que conlleva, así como de los procesos de agresividad y violencia que puede generar.

Propuesta de intervenciones a realizar

  • Transformar los juegos de competitividad con cooperativos o de colaboración.
  • Potenciar el trabajo en equipo hacia el individual.
  • Potenciar la conciencia social para ver al otro como igual, como una oportunidad no como una amenaza.
  • Crear espacios de conversación y debate para escuchar, pensar y reflexionar.
  • Generar compromiso por todo lo humano, la solidaridad y la empatía.
  • Educar en principios y valores.

«Soy semilla de cambio»